La comparativamente mas pequeña rata de enfermedades del corazón sufrida por los franceses, a pesar de su altísimo consumo de mantequilla, quesos y embutidos, se ha llegado a conocer como "La Paradoja Francesa". Algunos expertos sugieren que el vino tinto es el que hace la diferencia.Estudios serios como los de los doctores St Leger AS, Cochrane AL, Moore F. sugieren que el vino tinto -especialmente si es consumido durante la comida- ofrece mayores beneficios cardiovasculares que la cerveza u otros espíritus. Otros estudios llevados a cabo en países consumidores de vino por excelencia, muestran la menor incidencia de enfermedades coronarias, que en países tradicionalmente consumidores de cerveza y que en países consumidores de otros tipos de licor.
El vino tinto contiene una variedad de substancias, además del alcohol, que previenen cuágulos sanguíneos, relajan las paredes venosas y previenen la oxidación de la lidoproteínas de baja densidad (LDL ó Colesterol Malo).
En la práctica la elección de la bebida alcoholica a consumirse pareciera no tener ninguna importancia sobre la salud cardiovascular, pero en un estudio realizado en Inglaterra por la organización Health Professionals que abarcó un periodo de 12 años y estudió los habitos de bebida de mas de 38,000 hombres, se observó que los Bebedores Moderados tuvieron 30% a 35% menos chances de sufrir un paro cardíaco que el grupo de los NO Bebedores ó el de los Fuertes Bebedores-
Este estudio incluyo en su muestra bebedores de vino tinto, cerveza y otros espíritus, además se observó que esta reducción de afecciones coronarias era similar entre los que bebían con la comida o fuera de las horas de comida. Este estudio sugiere que la frecuencia de bebida si importa. Los hombres que toman moderadamente en base diaria, sufren menos infartos que los que toman mucho e inclusive los que no toman.
Fuente: Harvard school of Public Health
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